Comprender la salud cardiovascular depende de un conocimiento integral de las métricas de salud clave. Al familiarizarse con los números esenciales (colesterol total, presión arterial, azúcar en sangre e índice de masa corporal (IMC), obtendrá información valiosa sobre la salud de su corazón y podrá tomar medidas proactivas para salvaguardarla.
Según la Asociación Estadounidense del Corazón, no se puede controlar lo que no se mide, por eso es tan importante conocer los riesgos de enfermedad cardiovascular, y conocer este riesgo comienza con conocer los números.
Colesterol total:
Comience con el colesterol total, una medida de las grasas que circulan en la sangre. Mantener un nivel saludable es crucial ya que el colesterol elevado puede contribuir a la acumulación de placa arterial, aumentando el riesgo de enfermedad cardíaca. Trate de alcanzar un nivel de colesterol total inferior a 200 mg/dL y trabaje con su proveedor de atención médica para diseñar estrategias si es necesario realizar ajustes.
Presión sanguínea:
La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias. Se expresa como dos números: sistólica (presión durante los latidos del corazón) y diastólica (presión entre latidos). La presión arterial óptima ronda los 120/80 mm Hg. El seguimiento regular y los ajustes en el estilo de vida, como una dieta saludable para el corazón y el ejercicio, pueden ayudar a mantener estos números.
Glucemia:
Un aspecto vital de la salud del corazón es controlar los niveles de azúcar en sangre. El nivel de azúcar en sangre no controlado puede provocar diabetes, lo que aumenta los riesgos cardiovasculares. Los niveles de azúcar en sangre en ayunas inferiores a 100 mg/dL son ideales. El control regular, una dieta equilibrada y mantenerse físicamente activo son fundamentales para mantener niveles saludables de azúcar en sangre.
Índice de masa corporal (IMC):
El IMC es una medida de grasa corporal basada en la altura y el peso. Un IMC saludable se sitúa entre 18.5 y 24.9. Mantener un peso adecuado es fundamental para reducir la tensión sobre el corazón y minimizar los riesgos cardiovasculares. Concéntrese en una dieta equilibrada y ejercicio regular para lograr y mantener un IMC saludable.
El conocimiento es poder y conocer sus números le brinda las herramientas para tomar decisiones informadas sobre la salud de su corazón. Los controles periódicos con su proveedor de atención médica y las modificaciones en el estilo de vida pueden afectar significativamente estas métricas. Tome control de su bienestar cardiovascular: conozca sus cifras, comprenda los riesgos y emprenda un viaje hacia una vida saludable para el corazón.
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