El tratamiento más eficaz para la depresión, la TEC también se puede utilizar para tratar la catatonia y otras formas de enfermedad mental, especialmente cuando los síntomas no han respondido a otros tratamientos. La TEC se puede administrar a pacientes hospitalizados o de forma ambulatoria. 

La mayoría de las personas necesitarán de 6 a 12 tratamientos, que inicialmente se administran de 2 a 3 veces por semana, pero el número exacto se individualizará según las necesidades y la respuesta de la persona. Algunas personas se benefician de tratamientos de mantenimiento adicionales para evitar que los síntomas reaparezcan. 

Antes de comenzar la TEC, se evaluará cuidadosamente a una persona para ver si es probable que la TEC sea útil y para adaptar el enfoque de tratamiento a sus necesidades médicas y psiquiátricas. Como parte de esta evaluación, el equipo de Stony Brook ECT Service, dirigido por Dra. Laura Fochtmanny Dra. Adeeb Yacoub, le pedirá información al profesional de salud mental que actualmente le está brindando tratamiento. 

Durante cada tratamiento de ECT, una enfermera de ECT preparará al paciente para el tratamiento. A continuación, un anestesiólogo administra un medicamento anestésico y otro relajante muscular. Una vez que el paciente está dormido, el psiquiatra le da una estimulación eléctrica muy breve a través de electrodos colocados en la cabeza del paciente. Esto crea una convulsión breve, que produce los efectos beneficiosos de la TEC. Al igual que con cualquier procedimiento que involucre anestesia, existe un riesgo muy poco común de problemas respiratorios o cardíacos. En consecuencia, la frecuencia cardíaca, la presión arterial y la oxigenación del paciente se controlan de cerca durante todo el tratamiento, que dura entre 5 y 10 minutos. Se lleva a cabo un seguimiento adicional durante aproximadamente una hora, hasta que el paciente esté listo para abandonar el área de recuperación. Muchas personas experimentarán confusión, problemas de concentración o lagunas temporales en la memoria alrededor del momento del tratamiento. Estos generalmente se resuelven dentro de las dos semanas posteriores a la interrupción de la TEC, pero con menos frecuencia, las lagunas en la memoria pueden persistir o afectar recuerdos que están más atrás. Otros efectos secundarios incluyen dolor de cabeza, náuseas o dolores musculares, que son temporales y pueden tratarse con medicamentos. Nuestro equipo de ECT anima a los pacientes y sus familias a que pregunten, en cualquier momento, si tienen preguntas sobre los efectos secundarios u otros aspectos del tratamiento de ECT.  

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