Pruebas para la evaluación del esófago

Pruebas medicas 

¿Qué es una prueba de manometría esofágica?
En ciertos pacientes, nuestro equipo puede recomendar una prueba de manometría esofágica. Esta es una prueba médica que mide la función de los músculos del esófago, que es el tubo que conecta la boca con el estómago. Durante la prueba, nuestro equipo capacitado en el Motility Center inserta un tubo delgado y flexible a través de la nariz o la boca hasta el esófago. El tubo contiene sensores que miden la presión y el movimiento de los músculos del esófago cuando una persona traga. La manometría esofágica puede ayudar a diagnosticar afecciones como la ERGE y trastornos específicos de la deglución.

¿Qué es una prueba de monitoreo del pH esofágico?
Es posible que nuestro equipo recomiende una prueba de monitoreo del pH esofágico para evaluar más a ciertos pacientes. Este tipo de prueba médica puede medir la cantidad de reflujo ácido y no ácido que afecta el esófago. Hay dos tipos de pruebas de monitoreo de pH esofágico y el tipo de prueba realizada se decidirá después de la evaluación con nuestro equipo. Ambas pruebas pueden ayudar a diagnosticar enfermedades como la ERGE.

Monitoreo del pH esofágico basado en catéter
Durante esta prueba, nuestro equipo experto en el Motility Center inserta un tubo delgado de plástico a través de la nariz, y nuestro equipo capacitado lo guía suavemente por la parte posterior de la garganta hasta el esófago. La nariz se adormecerá durante un breve período de tiempo, pero no se necesita sedación ni anestesia. El tubo contiene sensores que miden la acidez y el movimiento de líquidos y gases en el esófago. Los pacientes se irán a casa con este tubo durante 24 horas y se les pide que lleven un diario de síntomas y actividades para que los resultados puedan correlacionarse con la actividad en el esófago. Durante las 24 horas que el catéter está colocado, el paciente puede realizar sus actividades habituales, por ejemplo, comer, dormir, hacer ejercicio leve y trabajar. El paciente regresa al día siguiente para que le retiren el tubo.

Monitoreo de pH esofágico inalámbrico con cápsula (Bravo^TM Prueba de pH)
Esta prueba se realiza durante una endoscopia y utiliza una cápsula, del tamaño de una goma de borrar en un lápiz, que se adherirá a la pared del esófago. Los pacientes necesitan anestesia para completar una endoscopia. La cápsula contiene una sonda de detección de ácido y un transmisor. La sonda monitorea la cantidad y frecuencia de ácido en el esófago y transmite esta información a una grabadora que se guarda en una bolsa que lleva el paciente. La sonda se puede programar para registrar el ácido en el esófago durante 48 o 96 horas, lo que da suficiente tiempo para capturar la actividad del ácido en el esófago. Esta prueba no tiene un tubo que sobresalga de la nariz y se requiere un diario de síntomas y actividades para que los resultados puedan correlacionarse con la actividad en el esófago.

Durante las 48 a 96 horas que la cápsula está colocada, el paciente puede realizar sus actividades habituales, por ejemplo, comer, dormir, hacer ejercicio leve y trabajar. Se indicará al paciente cuándo devolver el registrador al equipo de motilidad. La cápsula finalmente se desprenderá de la pared esofágica por sí sola, generalmente después de cinco a siete días, y se elimina en las heces.

Importante tener en cuenta: Los pacientes no pueden someterse a una MRI (imágenes por resonancia magnética) durante las 48 a 96 horas de la prueba Y durante los 30 días posteriores. También hay ciertos pacientes que no pueden hacerse esta prueba. Los pacientes con marcapasos, desfibrilador implantable o neuroestimuladores no pueden usar el Bravo^TM Prueba de pH.