Escrito por Chirayu V. Gor, MD, FACC
Para comprender qué abarca la hipertensión pulmonar, me gusta pensar en cómo fluye la sangre al corazón. Primero, la sangre fluirá hacia las dos cámaras del corazón del lado derecho: la aurícula derecha y el ventrículo derecho. La aurícula derecha es la cámara superior y el ventrículo derecho es la cámara inferior. El ventrículo derecho bombeará la sangre a través de las arterias pulmonares hacia los pulmones para oxigenarse. La sangre volverá a entrar por el lado izquierdo del corazón hacia la aurícula izquierda y luego hacia el ventrículo izquierdo. El ventrículo izquierdo bombea sangre desde el corazón hacia la aorta y hacia el cuerpo.
Entonces, si lo piensas, en realidad hay dos corazones: el corazón derecho y el corazón izquierdo. La hipertensión pulmonar es una presión arterial elevada que afecta el lado derecho del corazón y la arteria pulmonar. Con el tiempo, cuando la presión se acumula en el lado derecho del corazón, los pacientes desarrollarán síntomas que incluyen dificultad para respirar e hinchazón de las piernas. A veces, la presión arterial elevada del lado derecho distorsiona la forma del ventrículo derecho y la arteria pulmonar. Muchos pacientes notarán una disminución en la actividad funcional. Pueden tener dificultades para caminar de una habitación a otra, hacer la cama o ir de compras al supermercado debido a la falta de aire.
Hay muchas causas de hipertensión pulmonar, como enfermedades del tejido conectivo (esclerodermia), insuficiencia cardíaca crónica, valvulopatía, enfermedades pulmonares crónicas como EPOC, apnea del sueño, coágulos sanguíneos y otros trastornos. A veces, la hipertensión pulmonar se diagnostica sin una causa identificable y se denomina hipertensión pulmonar idiopática.
La evaluación de la causa de la hipertensión pulmonar incluye varias pruebas y puede incluir una tomografía computarizada del tórax, análisis de sangre especializados y cateterismo cardíaco. A menudo, los pacientes necesitarán la experiencia de un neumólogo y reumatólogo para excluir algunas de las causas de la hipertensión pulmonar. Existe un tratamiento para la hipertensión pulmonar y se adapta al paciente una vez finalizado el estudio. El pilar del tratamiento es mejorar la respiración y la calidad de vida.
